Una tortuga Caretta caretta que fue rescatada a causa de sus heridas, ha sido devuelta a su medio natural, después de recuperarse en nuestras instalaciones. Fue encontrada en Gran Canaria y atendida en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Tafira. Para su última etapa de recuperación fue enviada a Tenerife para brindar a este animal la oportunidad de nadar en nuestro acuario de más de 15 metros de largo, donde pudo recuperar movilidad y fuerza antes de volver a enfrentarse a los peligros del océano.
Este ejemplar de tortuga boba llegó al acuario el pasado mes de Agosto, después de haber sufrido graves lesiones que le produjeron una deformación del lado bucal izquierdo y la pérdida del ojo de ese mismo lado. Aunque su herida estaba ya cicatrizada, estaba muy débil y debía aprender a moverse en el agua con la deficiencia del ojo que había perdido.
Llegó pesando poco más de 6kg y una longitud de 39 centímetros. Unos meses después, ha ganado peso y talla. Con más de 9kg y 43 cm de longitud, está totalmente recuperada y preparada para volver al mar, su medio natural. Y se va con un nombre propio, Lily, porque así la llamaron los alumnos de Educación Infantil del colegio San José (A guarda, Pontevedra) que tuvieron la oportunidad de conocer a este animal a través de videoconferencia, dentro del programa de Educación Ambiental que Loro Parque Fundación desarrolla de manera gratuita desde el año 2006 con centros escolares de toda España.
A la despedida, en la playa del Puertito de Armeñime (Adeje, Tenerife) acudieron 75 alumnos/as de Educación Primaria del colegio de Armeñime, que se mostraron muy interesados en las explicaciones recibidas por los educadores de Loro Parque Fundación y Océano Sostenible, comprendiendo el importante papel que todos debemos ejercer como vigilantes de los mares.