Parece mentira que, después de 7 años desde que Morgan apareciera moribunda en la costa holandesa, 5 pronunciamientos judiciales que acreditan que devolverla al mar sería su muerte y haberse evidenciado su problema de sordera, siga habiendo organizaciones empeñadas en denunciar a Loro Parque exigiendo su liberación. Pero ésa es una conocida estrategia de algunos grupos autoproclamados animalistas: buscar la repercusión en los medios de comunicación y en las redes sociales para obtener atención y fondos. A pesar de que saben muy bien que Morgan no tiene posibilidades de ser liberada y de que hay una sentencia firme del más alto tribunal holandés que lo ratifica desde 2014.
Free Morgan Foundation nos tiene acostumbrados a la estrategia del escándalo. Presentan una denuncia contra Loro Parque, hacen una campaña en los medios generando alarma social y preocupando a las personas honestas amantes de los animales, y obtienen fondos para su organización. Pero cuando las administraciones desestiman y rechazan esas denuncias por carecer de fundamento, jamás reconocen su equivocación y nunca lo hacen público. Ni siquiera ponen las resoluciones negativas en su página web para el conocimiento de sus miembros. Eso es un fraude.
Esta semana, la Autoridad CITES Holandesa ha desestimado el último recurso que Free Morgan Foundation planteó sobre la supuesta ilegalidad del permiso CITES de Morgan. Hace ya unos meses que esa misma administración respondió que la acusación de Free Morgan Foundation no tenía fundamento, que Loro Parque lleva a cabo investigación científica con orcas y que no es incompatible realizar actividades de educación y sensibilización con el permiso expedido en 2011. La autoridad CITES Española (donde también envió Free Morgan Foundation su protesta) respondió en los mismos términos en enero de este año: “El traslado de la orca Morgan desde Dolfinarium Harderwijk en Holanda a las instalaciones de Loro Parque en Tenerife en el año 2011 se realizó cumpliendo lo establecido en el artículo 9 del Reglamento (CE) 338/97 y avalada por la sentencia del Consejo de Estado de holanda que estableció que la devolución del animal al océano no era una alternativa ni una solución satisfactoria”. Sin embargo, no se molesten en buscar, no encontrarán esta información en la página de Free Morgan Foundation.
Desafortunadamente, sabemos que ésta no será la última denuncia, estamos seguros de que Free Morgan Foundation y algunos otros grupos minoritarios continuarán con la estrategia del escándalo que les es tan rentable económicamente.
Mientras tanto, Morgan es feliz con su nueva familia, ha alcanzado ya casi su tamaño adulto y pesa más de 2.100 Kg. Y su bienestar está fuera de toda duda, como en la reciente auditoría realizada en Loro Parque por la American Humane Association, una organización que vela por el bienestar de los animales en todo el mundo, se detalla: “La actividad y la energía de las orcas es reconfortante. Los entrenadores realizan seis sesiones de entrenamiento y tres presentaciones diarias; esta estimulación facilita un bienestar excepcionalmente positivo para las seis orcas”. Esto, junto con la obtención de la más alta calificación (100%) de los estándares de bienestar de la Asociación Británica de Agentes de Viaje (ABTA) auditados por Global Spirit, es lo que más nos satisface a todas las personas que en Loro Parque trabajamos cada día por el bienestar de Morgan y de los miles de animales bajo nuestro cuidado.