Investigadores de Loro Parque Fundación y otras organizaciones han instalado cámaras en una área de conservación transfronteriza situada entre Angola, Botswana, Namibia, Zambia y Zimbabwe, que abarca 519.000 kilómetros cuadrados, para ver cómo interactúan y viven los leones, cuya población en el continente africano ha pasado de ser de 100.000 ejemplares hace una década a los 25.000 que se calcula que hay actualmente.
El director científico de Loro Parque Fundación, Rafael Zamora, ha explicado en declaraciones a Efe que, gracias a la colocación de cámaras trampa, se ha elaborado un mapa de todos los animales que viven en la zona y se han descubierto especies que no se sabía que estaban allí, como antílopes y otros felinos más pequeños.
Este mapa fotográfico recoge información sobre la gran cantidad de mamíferos que viven en la zona y permitirá que los científicos conozcan la salud que tiene el hábitat donde están los leones distribuidos.
A medida que avance este proyecto, en el que también está integrada Pantera, organización especializada en la conservación de especies felinas, podrán saber además los animales con los que, de alguna manera, interactúan los leones.
También colabora en este estudio Futouris, la asociación medioambiental de turoperadores de Alemania, para promover que los alojamientos turísticos de la zona sean más sostenibles y comprometidos con que se haga un uso sostenible de la actividad turística en la zona.
Cómo interactúan y viven los leones
Según Rafael Zamora, es importante saber dónde se distribuyen los leones para no molestarlos, motivo por el que Loro Parque ha financiado con 125.000 dólares este proyecto, cuya segunda fase consistirá en la colocación de radiocollares con teletransmisores a los leones para así obtener datos sobre sus desplazamientos y elaborar un censo real de esta zona en concreto.
Los científicos les están colocando ahora estos collares a los animales y tendrán que esperar a recibir los datos del satélite para poder trabajar con los resultados, si bien continuarán recabando información durante los próximos años.
Se trata, según ha aclarado el director científico de Loro Parque Fundación, de un proyecto que está en fase de inicio y para poder determinar los resultados definitivos que se puedan aplicar en la naturaleza habrá que esperar hasta tres años. EFEverde